Yo era un ser feliz que jamás se había enamorado, era un ser feliz que nunca había sufrido por amor, que nunca había sufrido un "No te quiero más", y estaba buenísimo.. La impunidad, el poder..

Traducilo

martes, 6 de diciembre de 2016

Comenzar de cero, bueno, casi.

Volví. Y no para decir que no tengo excusas para haberme ido. Siempre las tuve. Pero me canse de estar de duelo, duelo por mi vieja (que sigo esperando alguna señal de que en algún lugar está bien y se siente querida por todos los que la extrañamos), duelo por lo que paso con el último chico de quién me enamoré, por lo que no pasó con él y lo que podría haber pasado (si no hubieras sido un pelotudo nene) Hoy por fin entendí, no puedo avanzar nada si sigo de duelo. Y ni me di cuenta que estaba de duelo, era sólo andar triste por ahí, odiar a todo el mundo, no querer levantarme de la cama, no querer estudiar (y ustedes que me leen saben que amo estudiar), no querer leer (no leí nada este año salvo un poco de Stephen y eso es horrible para mí) no querer nada. También estaba en que no podía ir a ciertos lugares, o mirar lugares de Buenos Aires por la tele o pensar en lugares a los que fui con mi mamá. Tuve muchas salidas en las que terminé borracha porque no podía aceptar estar divirtiéndome con mi mamá enterrada tres metros bajo el suelo, una de esas salidas termino conmigo vomitando todo un lunes por la resaca del SÁBADO. También estuvieron los ataques de pánico a cualquier hora y en cualquier lugar, y ustedes dirán que quizás necesito ir a un psicólogo y si, tienen razón pero los tiempos no me daban y mi psicóloga cuando mi mamá estaba enferma lo único que hacia era sufrir conmigo.
Pero hoy, me di cuenta. Estábamos paseando a mi perrita y mi viejo me dice entre lágrimas "a tu mami le hubiera encantado hacer esto con nosotros" y me enojé, me enojé mucho y sólo atine a decirle "mamá no está, no podemos seguir pensando así" y todo hizo un clic. Yo no debería estar llorando por los rincones, yo no debería estar viendo fotos y sintiéndome como que todo se cae alrededor mío. Y yo no debería sufrir por un pelotudo que no supo valorar lo que tenía justo en frente de sus ojos.
Así que acá estoy, con fuerzas renovadas, o algo así. Voy a tratar de escribir seguido, de pasar por los blogs, de dejar saludos; al fin y al cabo extrañé estar acá y saber que hay alguien que me lee sin prejuicios.

3 comentarios:

SantitAh dijo...

Meeeeeeeel!
Te extraño, boluda. Y qué mal que anduvieras de duelo por todo sin darte cuenta. Me alegro que lo estés superando lentamente y que de a poco te vuelvan las ganas de seguir con tu vida y de hacer las cosas que te gustan sin pensar en los recuerdos que tienen pegados.
Te mando un abrazote tremendo y sabes que te quiero, berenjena loca!

Que andes bien.

El Demiurgo de Hurlingham dijo...

No es fácil para nada, pero llegan momentos en que hay que dejar los duelos atrás, para seguir.
Te leí en lo de Veinteava.

Veinteava dijo...

Gracias por pasar a dejar tus saludos, M.

No sabés cuánto, sinceramente, de corazón, me alegra tu vuelta.

Tu fuerza es increíble y tu coraje, en este momento, va a ser lo que te va a sacar adelante. Yo creo que a todos los seres que nos quieren, estén o no con nosotros, quieren siempre lo mejor para nosotros.

Y sé, independientemente de todo, que tu vieja está queriendo lo mejor para vos; siempre.

¡Te mando un abrazo gigante!